El ejército sirio toma el control de un barrio rebelde de Alepo
AFP / Thaer Mohammed
Unos civiles observan
cómo una grúa limpia de escombros el barrio de Tariq a Bab, en Alepo, el
24 de septiembre de 2016, después de unos bombardeos de las fuerzas
gubernamentales
El ejército sirio tomó este martes el control de un
barrio rebelde situado cerca de la ciudadela del centro de Alepo, afirmó
una fuente militar.
"El ejército tomó completamente el control del barrio Farafira, al noroeste de la ciudadela de Alepo, después de neutralizar varios terroristas, y las unidades del cuerpo de ingenieros están desminando el barrio", agregó esta fuente a la AFP.
El régimen utiliza el término "terrorista" para designar a todos los que tomaron las armas contra Damasco, se trate de rebeldes o de yihadistas.
El barrio Farafira fue tomado en 2012 por los rebeldes,
que habían entonces conquistado la mitad de la antigua capital económica
del país.
"Esta operación se inscribe en el marco de las operaciones militares que fueron anunciadas (el jueves) que incluye un componente aéreo y otro terrestre con la utilización de artillería", agregó este responsable.
Desde el fin de la tregua, los barrios rebeldes de Alepo son objeto de un intenso bombardeo de la aviación del régimen y de Rusia.
Los ataques en la ciudad siria de Alepo constituyen una "violación flagrante del derecho internacional", acusó este martes el secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, que exhortó a Rusia a hacer "esfuerzos creíbles" para restaurar la tregua.
"Los espantosos ataques de Alepo son moralmente inaceptables y una violación flagrante del derecho internacional", estimó Stoltenberg, al margen de una reunión de ministros de Defensa de la Unión Europea (UE) en Bratislava.
Stoltenberg no identificó al régimen sirio o a su aliado ruso como los responsables de estos bombardeos de los barrios rebeldes de la segunda ciudad siria que dejaron decenas de civiles muertos.
Pero esta denuncia interviene después de que las potencias occidentales criticaran ferozmente a Rusia por la violencia de los ataques.
Estados Unidos acusó a Moscú de "barbarie" y Gran Bretaña y Francia alegaron que eran crímenes de guerra.
Rusia consideró "inaceptable" esta retórica.
Stoltenberg dijo que la violencia "subraya la importancia de hallar una solución diplomática y pacífica a la crisis en Siria".
"Me uno a los llamamientos de la comunidad internacional a Rusia para que haga esfuerzos creíbles para restaurar el cese de las hostilidades, que permita el ingreso de la ayuda humanitaria a Alepo y cree las condiciones necesarias para que se reanuden las negociaciones (de paz) auspiciadas por la ONU", agregó.
copiado https://www.afp.com/es/noticias/1
AFP / Thaer Mohammed
Unos civiles observan
cómo una grúa limpia de escombros el barrio de Tariq a Bab, en Alepo, el
24 de septiembre de 2016, después de unos bombardeos de las fuerzas
gubernamentales
"El ejército tomó completamente el control del barrio Farafira, al noroeste de la ciudadela de Alepo, después de neutralizar varios terroristas, y las unidades del cuerpo de ingenieros están desminando el barrio", agregó esta fuente a la AFP.
El régimen utiliza el término "terrorista" para designar a todos los que tomaron las armas contra Damasco, se trate de rebeldes o de yihadistas.
"Esta operación se inscribe en el marco de las operaciones militares que fueron anunciadas (el jueves) que incluye un componente aéreo y otro terrestre con la utilización de artillería", agregó este responsable.
Desde el fin de la tregua, los barrios rebeldes de Alepo son objeto de un intenso bombardeo de la aviación del régimen y de Rusia.
Los ataques en la ciudad siria de Alepo constituyen una "violación flagrante del derecho internacional", acusó este martes el secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, que exhortó a Rusia a hacer "esfuerzos creíbles" para restaurar la tregua.
"Los espantosos ataques de Alepo son moralmente inaceptables y una violación flagrante del derecho internacional", estimó Stoltenberg, al margen de una reunión de ministros de Defensa de la Unión Europea (UE) en Bratislava.
Stoltenberg no identificó al régimen sirio o a su aliado ruso como los responsables de estos bombardeos de los barrios rebeldes de la segunda ciudad siria que dejaron decenas de civiles muertos.
Pero esta denuncia interviene después de que las potencias occidentales criticaran ferozmente a Rusia por la violencia de los ataques.
Estados Unidos acusó a Moscú de "barbarie" y Gran Bretaña y Francia alegaron que eran crímenes de guerra.
Rusia consideró "inaceptable" esta retórica.
Stoltenberg dijo que la violencia "subraya la importancia de hallar una solución diplomática y pacífica a la crisis en Siria".
"Me uno a los llamamientos de la comunidad internacional a Rusia para que haga esfuerzos creíbles para restaurar el cese de las hostilidades, que permita el ingreso de la ayuda humanitaria a Alepo y cree las condiciones necesarias para que se reanuden las negociaciones (de paz) auspiciadas por la ONU", agregó.
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